Este proyecto fue diseñado en la Aarhus School of Architecture durante la primavera de 2014.
Comunidad abierta es un proyecto de transformación de una manzana urbana situada en el barrio barcelonés de Poblenou. Dentro de la manzana, se conservan todos los edificios de unas cualidades y valores reseñables, y sólo se desmantelan aquellos edificios realmente deteriorados y otras construcciones precarias del interior de la manzana. El programa principal es residencial, buscando establecer una comunidad de vecinos socialmente muy abierta y dinámica. Para lograrlo se proyectan diversos espacios de encuentro: un hangar existente se rehabilita y convierte en un multitaller cultural para todo el barrio; las viviendas se agrupan en alas abiertas inmersas en espacios comunes ajardinados y de juegos de uso público; las diferentes alas de viviendas de la manzana están conectadas entre sí por una red de balcones en planta primera que buscan invitar a la comunicación entre los vecinos. Esta red se conecta con el taller cultural habilitado para el barrio.
El diseño general de los nuevos volúmenes y su posición se han estudiado para ofrecer unas condiciones ambientales (lumínicas, visuales y espaciales) saludables a las viviendas. El diseño arquitectónico está basado en estrategias bioclimáticas: los amplios balcones, unos toldos especiales y la vegetación de los patios protegen del calor a las viviendas. Además, en las viviendas se ha buscado propiciar al máximo una ventilación natural cruzada para favorecer las corrientes de brisa que alivien de la elevada humedad del verano barcelonés.